YA HAN HUIDO QUINCE

La cosa sigue ligeramente mejor, pero muy ligeramente. Voy tirando clase a clase, sin ganas, sin motivación, sin esperanzas de que la situación cambie sustancialmente. Duermo mejor. El director está muy suave conmigo. Supongo que teme que me arrepienta y me marche a estás alturas. Por cierto, la semana pasada se fue una profesora, sin avisar, mandando un burofax. Con ella ya van quince que han huido este curso. El jueves pasado tuve otra tarde espantosa y llegué fatal a casa, tanto que me planteé no quedar al día siguiente para cenar con mis amigos de Murcia, que venían a una boda. Pero el viernes me animé, y más cuando F. se quedó a dormir, y esa noche y la mañana siguiente fue una de las más bonitas que hemos pasado. El finde siguió bien. Mi madre comía por ahí con amigos el sábado. Así que invité a mi hermana y su novio a almorzar. Les hice arroz blanco frito con chorizo. Salió rico y es muy fácil, cocina para tontos ¡Probad! Se hace el arroz blanco vaporizado, y se deja un buen rato extendido en una bandeja para que se seque lo más posible. Se fríe chorizo troceado (el de la marca Revilla que ya venden preparado está rico), un poco, y en ese aceite y sin sacar el chorizo se va friendo el arroz, echando más aceite para que vaya quedando jugoso y no seco. Previamente se ha rallado huevo duro y se esparce por encima, dos para cada tres personas.

Carlos ha venido de Méjicos y se queda una semana. Organicé una cena con todos y él apareció en plan sorpresa. Y como viene siendo habitual, el domingo por la noche me entró bajón.

Ver a F. entre semana me carga la batería, sobre todo últimamente. Hoy íbamos a quedar pero le surgió un imprevisto. Nos hemos quedado chafados. Ni mañana ni pasado podemos vernos por mi horario, así que a esperar hasta el viernes. No queda otra. Me he ido al centro comercial a dar una vuelta y a preguntar en una agencia de viajes acerca de los billetes de avión para Méjicos, que por cierto rondan los 1200 €, carísimos. Parece que vamos a viajar cuatro: F. R., Sonia y yo. Si mañana fuese ya 1 de agosto...

Más canciones para levantar el ánimo, Bikini Girls With Machine Guns, de The Cramps.