domingo, octubre 22, 2006

EN MI TARJETA DEL MÓVIL

Tal y como suponía, este blog no va a ser actualizado como antes mientras mantenga el mismo horario laboral. Cada día que pasa me encuentro más cansado. Entre semana me levanto a las , 6:30, salgo de casa casi a las 7 y no vuelvo hasta casi las 9 PM, o sea que paso catorce horas fuera. Lo que me apetece al llegar es hablar con F. por teléfono, ver un poco la tele y acostarme. Cuando me mude a Rivas, incluso llegaré más tarde a casa. Lo único que puedo hacer al respecto es buscarme las clases particulares de los lunes y miércoles por Rivas. Tengo que intentarlo pronto. Y por supuesto no debo dejar de mandar mi CV aquí y allá para ver si encuentro otra cosa mejor.

Ha sido un fin de semana muy cinematográfico. Ayer fui con R. y J. a ver El Laberinto del Fauno. Yo iba predispuesto a que no me iba a gustar, lleno de prejuicios ante una película española de fantasía y guerra civil. Pues me tuve que tragar esos prejuicios porque la película es muy bonita, con una historia preciosa y buenas actuaciones. Es muy original y sorprendente. Me ha parecido un tanto Bajo Ulloa en su última película, mezcla de tenebrismo y fantasía, con un final inesperado. Hoy he ido a ver El Diablo Se Viste De Prada, que tan solamente se deja ver.

Esta mañana he ido a Rivas a dar un repaso y dejarlo todo algo más ordenado para cuando vayan el miércoles a poner la cocina. Me hace mucha ilusión tenerla lista para cuando venga F. el viernes que viene. Así podemos hacer el desayuno cuando nos levantemos. Ojalá mañana fuese ya sábado. En noviembre espero mudarme definitivamente.

Se me ha roto la lámpara de la India. La he fregado esta mañana, y tras ponerla se ha oído un chasquido y ¡zas!, así por las buenas se ha resquebrajado un poco. Apenas se ve, pero yo sé que está rota y no quiero tener nada roto en mi piso nuevo. Tendré que comprar otra, qué se le va a hacer.

Me he pasado a Movistar hace 4 días y ya he puesto una reclamación telefónica por lo mal que funciona el servicio al cliente por teléfono. Fue curioso como al pasar los números de mi agenda del teléfono viejo al Nokia que me han regalado, fui eliminando gente que no me interesa nada y a quien no pienso llamar. Los tiempos cambian, hay personas que permanecen, y hay otras que vienen y van, entre los cuales se encuentran los que no se merecen ocupar tiempo en mi vida, ni siquiera espacio en la tarjeta de mi móvil. Así que no les he metido en el teléfono nuevo.

Mañana hay que comprarse el CD de Fangoria.

viernes, octubre 13, 2006

UN PUENTE ETERNO

R. , J. y yo pasamos el día de ayer en Ávila. Hacía tanto tiempo que no iba que fue como ir por primera vez. Me gustó más de lo que recordaba. Fue la misma sensación que cuando fui a Cuenca hace unos meses con R. Se paseaba muy bien por Ávila, había pocos turistas. Fue una excursión muy culinaria, muy de bares y cafés. Santa Teresa es a la ciudad lo que Gaudí a Barcelona, está por todas partes. Visitamos su iglesia. En la zona de merchandising tienen expuesto un dedo anular de la Santa, con anillo y todo, lo tienen puesto como en un candelabro, y aún le queda carne, por algo es Santa. También tienen la suela de una sandalia. Había varios retratos, pero para mí Santa Teresa tiene la cara de Concha Velasco. Le pusimos varias velas, cada una con un respectivo deseo. A la vuelta nos paramos para pasear un ratito por el campo. Estas pequeñas escapadas sientan fenomenal, dejan una mezcla de cansancio y purificación corporal. Y lo de purificación nunca mejor dicho porque R. va a dejar de fumar para siempre. Esta vez es la definitiva.


Ya en Madrid fuimos a cenar a un Fresco, tomar algo rapidito y a casita, que había cansancio y hay que ahorrar. Lo primero que hice al llegar a casa fue llamar a F. y conectarme para comprobar que tenía entrada para ver a Morrissey. Acto seguido me saqué el billete de avión.

Es un puente eterno sin F, y todavía quedan dos días. Hoy solamente he salido para ir al banco y al piso a regar las plantas. Me he pasado la tarde embrutecido con Tele 5, viendo un GH que no sé quienes son, y me tragaría Donde Estás Corazón si el invitado no fuese Pipi Estrada. Mañana volveré, con S., para poner dos lámparas y accesorios del cuarto de baño. Después saldré con R. y J. si S. se va pronto o no hacemos algo juntos.

martes, octubre 10, 2006

QUÉ ASCO DE PÁJAROS
El sábado por la noche había mucha gente por el centro, y muy arreglada. Encontré sitio para cenar en el cuarto restaurante al que llamé, y eso que llamé a dos el viernes. Finalmente fuimos a un griego. Estaba todo muy rico y fue una cena con mucha conversación entorno a C., su viaje a Méjico, su relación con A, y su oferta de trabajo a S. Todos opinamos de todo. Tenemos mucha confianza. Además nos conocemos desde hace siglos. Cuando acabamos, nos fuimos a un café de al lado, y después yo me quedé con C. charlando a solas. Me contó mejor como ha sido su impresión en Méjico la semana pasada. Le espera un año nada fácil.

Cuando volví el domingo a mi piso la cocina seguía oliendo. Quité de nuevo la rejilla, me puse una bolsa en el brazo, lo metí por el hueco y... otro pájaro muerto situado algo más allá. Este estaba más putrefacto. Qué asco, por Dios. Me puse guantes y lavé la rejilla con lejía. Luego tiré el estropajo. Espero no haberme contagiado de gripe aviar o algo peor. A mí los pájaros no me gustan, y después de esta experiencia ya ni os cuento. De pequeño hubo un canario en casa al que llamamos Pichí, como el de Heidi, o sea que si hubiésemos tenido perro se hubiese llamado Niebla. Los pájaros que se queden lejos de mí, me ponen nervioso si están a pocos metros y sobre todo si vuelan cerca. Quizás se deba a la película. Yo de pequeño veía todo en la televisión. Mis padres jamás me mandaron a la cama por lo de los rombos. De hecho en clase les contaba Dallas y Dinastía a mis compañeros.

Estoy algo más tranquilo en el trabajo porque ya he aprendido a meter diferentes tipos de ejercicios online, después de pasarme toda la tarde del domingo. La verdad es que eso me viene bien porque puedo incluirlo en mi CV. No es que sea algo que no sepa hacer nadie, pero no lo sabe hacer todo el mundo. He seguido metiendo más ejercicios en huecos durante estos días, porque lo que uno prepara durante horas, los alumnos los hacen en una sola clase. Cunde poco. Pese a los pocos días que llevamos de curso y el inminente puente, tengo la sensación de que llevo varias semanas trabajando.

Me llamó F., muy contento porque le han dado un curso de cinco días en Londres. O sea que los dos vamos a ir en fechas próximas. Si hubiésemos coincidido hubiese sido la caña. Sí, he decidido ir a ver a Morrissey: salir el 8 muy temprano, verle, no dormir sino irme al aeropuerto, y volver al día siguiente igual de temprano. El vuelo de vuelta es a las 7 AM. Hay que estar en Luton sobre las 5, con lo cual no me compensa coger una habitación. Me voy al aeropuerto y ya está. Chris me ha dicho que puedo dejar mi bolsa, ducharme, etc. en su hotel.

Este jueves R. y yo queremos de excursión ir a La Granja. Queremos que llueva para coger setas.

sábado, octubre 07, 2006

EL DIA DE LAS AVES

Después de años de ser el Vicepresidente de mi Cooperativa, hacemos un sorteo y va y me toca ser el Presidente de la Comunidad en nuestra primera junta de vecinos. En fin, como tenemos administrador, le dije allí mismo que yo trabajo fuera de Madrid hasta muy tarde, que no puedo hacer nada, y me dijo que no me preocupase que él se encarga de todo. La primera junta fue bien, mejor de lo que esperaba, sobre todo considerando que como es una Comunidad nueva había muchos temas que tratar. Hubo quien dijo o propuso alguna que otra tontería, pero se les ignoró entre murmullos y punto.

Tenía unas ganas locas de que llegase el fin de semana tras mi primera semana de trabajo. Ayer por la tarde me fui con R. de compritas y más que nada a charlar, ponernos al día, porque no nos veíamos desde antes de que se fuese de viaje a Turquía. La semana que viene vamos a irnos de excursión a La Granja.

Mi sofá queda estupendo. No lo he visto hasta hoy sábado. He tenido tanto lío de trabajo que no me ha dado tiempo a ir al piso desde el fin de semana pasado. Desde hace unos cuantos días notaba un olor feo en la cocina. El pasado domingo con S. incluso miramos el gas por si acaso. Hoy el olor era más fuerte y desagradable. De repente he reparé en la rejilla que hay en el techo para la ventilación y vi plumas sobresaliendo. Me subí la escalera con una bolsa de basura, quité la rejilla y me encontré un pájaro grande muerto, que cogí con la bolsa de basura con cuidado de no tocarlo. Qué asco. Llego a casa y leo en el mundo.es que hoy Madrid celebra el Día de las Aves. Yo lo he celebrado de una manera muy macabra.

Se anunciaron más fechas y es probable que vaya a Londres a ver a Morrissey, volando el mismo día del concierto, 8 de diciembre, a las 7 AM y volviendo al día siguiente a la misma hora. No necesitaría alojamiento, pues si tengo que estar a las 5 AM en el aeropuerto es una tontería que pague hotel. Cuesta 81 euros. Mi compañera Nuria tuvo una idea estupenda: mis amigos me pueden regalar el billete por mi cumpleaños. Solemos poner 10 euros, así que hay de sobra, pues ese regalo me lo hacen al menos nueve amigos. Esta noche vamos casi todos a cenar a un restaurante griego.

miércoles, octubre 04, 2006

LOS OSITOS YA NO ESTÁN, LA MUGRE SIGUE

Poco a poco voy cogiendo el ritmo. Lo que pasa es que con el superpuente de la semana que viene lo volveremos a perder todos: alumnos y profesores. Por ahora me perece que los grupos van a ir bien. Me dan buena impresión y no son numerosos. Sigo sin sistema informático que me permita subir a Internet la gramática y ejercicios que he preparado. Me he pasado en persona a ver a los informáticos, que son unos pánfilos, y me han dicho que les llame mañana. Les he dicho que es urgente porque otros profesores dependen de mí. En fin, que yo no puedo hacer más.

Las clases particulares siguen siendo un rollo. Sólo me gusta una que llevo dando ya casi dos años, aunque muy intermitentemente a un jefazo de Telefónica. Le llevo un par de artículos del tema que sea de la BBC online y a charlar. Respecto a la clase que llevo dando a la adolescente de O’Donnell dos años, pues no os imagináis lo que me gustaría que pintasen la casa, porque está mugrienta y me da asco. El techo del salón, donde damos la clase, está resquebrajado en forma de cruz de punta a punta. Al menos este curso han quitado los ositos de peluche que adornaban todas las estanterías del salón, y cuando digo todas quiero decir todas, porque se trataba de casi treinta ositos, vestidos todos con diferentes trajes y uniformes. Yo no podía evitar contarlos a veces. Entre la mugre, los ositos y la chica, que es sosa como ella sola, la hora y media se me hacía eterna, así que el hecho de que ya no estén los ositos bombero, jardinero, piloto etc., es de agradecer. El lunes tengo una entrevista para unas clases extra, a ver si les intereso y me interesan.

Me ha llamado Julia desde Boston para preguntarme si voy a ir a ver a Morrissey a Manchester en diciembre. Le he dicho que no. Ya que no me lo puedo permitir, me reconforta haber tenido una escasa pero buena ración inmejorable este año.

Ya tengo sofá. No lo he visto puesto porque me he pasado la tarde con las clases. Tuvo que ir mi madre a mi piso. Dice que queda muy bien. ¡Qué ganas de tumbarme a la bartola en él y ver la tele! ¡Qué ganas de compartirlo con F.! Ah, esta tarde encontré un escobillero de aluminio barato y bonito en una tienda de chinos. Una cosa menos.

Lo mejor del último episodio de la primera temporada de Queer As Folk es cuando Justin va a la fiesta de graduación. Es todo un acontecimiento en USA (es la noche en que muchas de las chicas pierden su virginidad) y no recuerdo películas o series de TV en que haya salido como se lo plantea un gay. La escena del baile es preciosa al ritmo de Save Your Last Dance For Me de los Drifters. El diálogo entre él y Brian después también, y el giro dramático del final le da mucho realismo.
Me encanta el gitano aspirante OT. Canta bien, es sensible y muy guapo. Ya soy fan.

lunes, octubre 02, 2006

"UN HOMBRE MARCHÓ"

Siempre duermo mal la noche antes de empezar a trabajar. No tengo nervios ni me paso las horas pensando en qué grupos tendré, si me gustarán, les gustaré, ni nada de eso. Simplemente me quedo en vela pensando en esto y en lo otro. Total, que esta mañana me he despertado ya cansado para ir a mi primera jornada laboral después de dos meses, que se dice pronto. Al hacer el trasbordo en Sainz de Baranda vi como se iba un tren, pero no me importó ya que pasan cada minuto o poco más. Salvo excepciones. Tardó siete minutos según el panel, el andén se fue llenando de gente, con lo cual cuando llegó sólo cupimos tres personas en el vagón. Una manera maravillosa de empezar el día: apretujado, agobiado, sudando.

Al llegar a la Universidad, me entero de que me han hecho coordinador de uno de los grupos de inglés multimedia. Fenomenal, sobre todo cuando no tengo ni idea de meter ejercicios online y debería haber algo disponible para que el jueves o el viernes otros profesores y yo podamos usarlo. Tengo que aprender entre mañana y pasado e introducir material. Tengo mucho estrés.

Tras salir de la Universidad me he dirigido a dar dos clases particulares nuevas a un niño de once años y una niña de nueve. Me gustan los niños, aunque no me gusta nada enseñarles. No me lo paso bien. Prefiero mil veces clases a adolescentes, jóvenes o adultos. Además no están bien pagadas, pero hasta que me salga algo mejor tengo que coger lo que surja.

Hoy me mandó M.C. un sms diciéndome que se ha muerto Rafael Trabucchelli. Una lástima. Es alguien a quien admiro muchísimo. F. y yo tuvimos la suerte de conocerle en persona hace unos años, quedamos en una cafetería y nos contó cosas de Karina, Mari Trini, Raphael, Jeanette, Perales... Por sus producción pasó casi todo lo mejor de la música de los 70 de España. Su nombre me fue familiar desde que con cinco años empecé a leer créditos de discos. No me queda más remedio que citar Amores la mejor canción que hizo en su vida, que fue con Mari Trini, y que es mi canción favorita en castellano de todos los tiempos junto con Eres Tú:

Y quién cuando la vida se apaga
y las manos tiemblan ya
quién no no buscó ese recuerdo de una barca naufragar

En fin, un mal día.

domingo, octubre 01, 2006

EL BRICOLAJE

Ha sido el primer fin de semana sin F. desde julio, a excepción de cuando me fui a Jerez menos de una semana en agosto. No me apetecía salir, así que me he dedicado a dos visitas a Ikea (espero no volver hasta principios de noviembre) y a montar un par de cajoneras. El bricolaje no me gusta. No sé leer las instrucciones. Esos planos llenos de figuras con flechitas son chino para mí. Miro la bolsita con tropecientos tipos de tornillos y me agobio. Menos mal que me ha ayudado mi amiga S., que es muy apañada. El bricolaje me perece una actividad muy intensa. Hemos tardado bastante en terminar, y eso que disponíamos de un estupendo destornillador eléctrico, todo un invento desconocido por mí hasta hoy. Yo llevaba unas chucherías para picar, y ni nos ha dado tiempo. Al final, ya de noche, hemos ido a casa de C. a despedirle, que se va a Méjico lindo mañana por la mañana. Vuelve el jueves para marcharse poco después todo un año y medio. C. me ha ofrecido su coche durante su ausencia y he aceptado. Me vendrá muy bien para moverme por Rivas, hacer la compra y esas cosas. Además así ocupo mi garaje, que para eso lo tengo.

Además de las cajoneras –una ha quedado tan estupenda que parece que venía con el armario-, hemos puesto unas cortinas de uno de los baños. Me las regaló R. por mi cumpleaños el año pasado y quedan muy chulas. Son de un diseño muy pop, pero de colores serios. El fin de semana que viene lo dedicaré a poner dos lámparas y accesorios de los cuartos de baño, con ayuda claro, porque un taladro en mis manos puede ser un arma de destrucción masiva.

Mañana empiezo a trabajar. Madrugón, 6:30. He mirado la primitiva hace un rato por si me había tocado y ahorrarme trabajar el resto de mi vida... No me apetece nada de nada, pero qué remedio. Ahora más que nunca no me queda otra porque ya tengo una hipoteca. Los primeros días siempre son inquietantes hasta que ves como son los grupos de alumnos, tú no has empezado a examinarles y ellos ya lo están haciendo. Poco después ya nos examinamos mutuamente cada día. Una dato alentador es que este cuatrimestre sólo hay cuatro viernes de clases, el resto de los viernes será ir allí a preparar clases, corregir y hacer horas de oficina.
Echo mucho de menos a F. Me gustaría estar haciendo con él todo lo que hago sólo o con amigos. Hoy venía el DVD de Vacaciones en Roma con el periódico por 6 euros. Lo he comprado, pero voy a esperar a verlo con F. y recordar juntos los sitios que hemos visitado este verano.