martes, febrero 14, 2012

EQULIBRISTA


Cuando me enteré de la reciente publicación de Cecilia. Equilibrista, tardé un par de días en ir a Madrid a comprármelo. Mi primer recuerdo de Cecilia es de lo más remoto de mi infancia. Como ya os he contado, mi padre trabajó a principios de los 70 en CBS, produciendo discos de flamenco. Gracias a eso trajo a casa los discos de Cecilia que aún conservo, que de pequeño ponía sin entender bien la razón, pero sabiendo que ahí había algo distinto, y que poco más tarde empecé a poner con admiración. Cecilia, como Mari Trini, fue única. Su fusión de existencialismo vital y costumbrismo español consiguió unas canciones sublimes. Por algo ha permanecido en la memoria de España más allá de Dama Dama , Un Ramito de Violetas o Mi Querida España, sus tres canciones más famosas. Tres grandes canciones. Nadie ha cantado igual de la muerte en este país. La muerte es una constante en sus canciones, aquí y allá, como tema principal o no. Siempre acechándola, como en aquella carretera en que su coche chocó contra un carro de bueyes sin señalizar. Si no fuera, versioneada genialmente por Raphael, es el colmo, una serie de razones para no suicidarse. Una maravilla. Me Quedaré Soltera, es un tremendo lamento que dura hasta el funeral, donde probablemente no habrá nadie que llore. En fin, la lista de canciones es desgraciadamente limitada ya que su carrera fue corta. Pero ahí quedaron tres álbumes increíbles y otras cuantas canciones inéditas.

El libro interesa porque cuenta detalles de su infancia, juventud, de su carrera, de cómo luchó contra lo que le querían imponer, de cómo la OTI le daba igual, de su novio (también en el mundo de la música), del accidente, etc. Además, trae abundantes citas extraídas de entrevistas y de críticas musicales. El estilo y el prefacio del autor no me gustan, pero lo importante es la información que aporta. Siempre la llevaré en mi corazón y en mi iPod.

Cuando el domingo fui a acostarme, F. Me había dejado esto en la almohada. J


5 comentarios:

Justo dijo...

Lo estoy leyendo ahora...

Aún voy por la primera parte, sus años fuera, la llegada a Madrid, los inicios en la música.. lo estoy disfrutando mucho.

Una intérprete y compositora maravillosa, y de una personalidad única..

Justo dijo...

Lo estoy leyendo ahora...

Aún voy por la primera parte, sus años fuera, la llegada a Madrid, los inicios en la música.. lo estoy disfrutando mucho.

Una intérprete y compositora maravillosa, y de una personalidad única..

Anónimo dijo...

Te aseguro que si conocieses al autor como yo, un chico joven que ha luchado contra viento y marea para que un libro soñado por él durante años saliese a la luz, no serías tan crítica con su prefacio ni con su estilo.

A mí, y no por conocerle a él, me parece que el libro es redondo.

Max de Winter dijo...

Me parece que las canciones podrían estar más comentadas, que podría haber más detalles aportados por sus allegados. Hay contenido del prefacio que no entiendo. Además pienso que hay cosas que sobran, coletillas que no vienen a cuento. Y eso no tiene nada que ver con que haya luchado para que este libro haya visto la luz. De todas maneras, merece la pena leerlo y he aprendido cosas. Es mi opinión, y me alegro de que haya quien lo disfrute incluso más que yo.

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo contigo Max; aunque lo que mas se echa en falta es pasión. Este libro no te convertirá en un fan de Cecilia, eso lo tienes que ser ya, de lo contrario no te interesara nada.