“TODO TIENE SU MOMENTO, TODO TIENE SU LUGAR”
Hace dos años también tuve mucho trabajo por coger todas las clases particulares que me salían. En dos o tres ocasiones me quedé dormido durante unos segundos en alguna de ellas. Esta vez parece que lo llevo mejor, o al menos todavía no se me han caído los ojos. Me he librado del niño ruso y el lunes que viene es el último que le doy clase. Cuando me siento muy cansado me digo a mí mismo: con lo que has ganado extra hoy puedes pagar la comunidad, o la factura X, y eso me anima mucho. Son clases mal pagadas, pero al ser muchas son un buen extra.
¡Fangoria es nº 2, por detrás de Bisbal!
En mi vida he dicho “ahí te quedas” a muy poca gente, creo que en dos ocasiones en que se han pasado conmigo, una de ellas repetidamente. S. de Valencia es una de ellas. Hace un días mandó un mail a F, que también perdió contacto con él. El mensaje era una mezcla de sentimentalismo, mea culpa y reconciliación. En caliente, estuve a punto de contestarle brevemente en tono conciliador, pero luego decidí que no, que como dice la canción “todo tiene su momento, todo tiene su lugar”. Hay gente que aparecen y ya tienen momentos continuados durante toda nuestra vida, y gente que se queda en la cuneta, y lo pasado, pasado está. Paso de fantasmas, y mucho más cuando tengo un buen puñado de amigos en el presente.
Hoy ha empezado el Festival de Cine Gay. Si te gusta el cine y eres gay, está obligado ir. Si pusieran una bomba allí en hora punta eliminarían de un plumazo a todos los gays de Madrid a los que les gusta el cine. Mañana voy con R. a ver una peli llamada Third Man Out, que es un thriller de detectives que tiene buena pinta y se promete original. Es relativamente fácil saber cuales son las pelis buenas porque todos los años las ponen los viernes, sábados y domingos por la noche.
Hace dos años también tuve mucho trabajo por coger todas las clases particulares que me salían. En dos o tres ocasiones me quedé dormido durante unos segundos en alguna de ellas. Esta vez parece que lo llevo mejor, o al menos todavía no se me han caído los ojos. Me he librado del niño ruso y el lunes que viene es el último que le doy clase. Cuando me siento muy cansado me digo a mí mismo: con lo que has ganado extra hoy puedes pagar la comunidad, o la factura X, y eso me anima mucho. Son clases mal pagadas, pero al ser muchas son un buen extra.
¡Fangoria es nº 2, por detrás de Bisbal!
En mi vida he dicho “ahí te quedas” a muy poca gente, creo que en dos ocasiones en que se han pasado conmigo, una de ellas repetidamente. S. de Valencia es una de ellas. Hace un días mandó un mail a F, que también perdió contacto con él. El mensaje era una mezcla de sentimentalismo, mea culpa y reconciliación. En caliente, estuve a punto de contestarle brevemente en tono conciliador, pero luego decidí que no, que como dice la canción “todo tiene su momento, todo tiene su lugar”. Hay gente que aparecen y ya tienen momentos continuados durante toda nuestra vida, y gente que se queda en la cuneta, y lo pasado, pasado está. Paso de fantasmas, y mucho más cuando tengo un buen puñado de amigos en el presente.
Hoy ha empezado el Festival de Cine Gay. Si te gusta el cine y eres gay, está obligado ir. Si pusieran una bomba allí en hora punta eliminarían de un plumazo a todos los gays de Madrid a los que les gusta el cine. Mañana voy con R. a ver una peli llamada Third Man Out, que es un thriller de detectives que tiene buena pinta y se promete original. Es relativamente fácil saber cuales son las pelis buenas porque todos los años las ponen los viernes, sábados y domingos por la noche.
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