MADRID

Han dicho en el telediario que según en Herald Tribune de NY Madrid es una de las diez mejores ciudades en las que vivir. Hablan de razones como el clima, la tolerancia, el acceso a la cultura, etc. Me encanta Madrid, pero no soy nada chovinista. A mí, me parece que exageran, y mira que me gusta mi ciudad y nunca me he planteado irme. Ahora que vivo en un pueblo desde hace poco y trabajo en otro desde hace unos años, creo que nunca dejaré de sentirme de la capital. Es cierto que el transporte ha mejorado. El metro llega a muchos más sitios cada año, aunque ello signifique que sea más lento. En cuanto a la oferta cultural, la música, al menos la música pop tenía más apoyo antes. No hay más que recordar aquellos conciertos de principios de los 80 que costaban doscientas pesetas y en los que vi en el Palacio de Deportes a Soft Cell, a Dinarama, a OMD, etc., o gratis, como Marc Almond o The Smiths en el Paseo de Camoens. El sábado por la noche cuando salimos del hindú estaba Plácido Domingo cantando en una pantalla gigante en la Plaza de Oriente. Me pareció una patochada, porque la gente estaba charlando y tomándose cervezas, los niños correteando y el vaivén en la plaza impedía que hubiese un sonido digo de ese tipo de música.

En la noticia decían que otro dato favorable para la clasificación de Madrid es lo de las bodas gays, algo extensible a toda España, claro, y que en Madrid hay mucha tolerancia. Habrá más que en otras partes, pero creo que en los medios se vende mucha más tolerancia de la que realmente hay. Si aquí todo fuese como lo ven fuera, no habría homosexuales armarizados, y una pareja de gays o lesbianas podría darse un morreo en cualquier bar de barrio. Sí, dos gays se pueden casar, pero no pueden ir cogidos de la mano sin temor a que les den una paliza. Y lo segundo es más importante que lo primero.

Yo en Rivas estoy estupendamente. Se vive bien. Me voy acostumbrando al transporte, o más bien no me queda otra. En ese sentido mejoraré cuando abran mi parada de metro, muy cerca de mi casa, a principios del año que viene. Es muy tranquilo, muy pueblo, pese a que es grande y al nuevo centro comercial. Está muy politizado, eso no me gusta nada de nada. La gente parece estar contenta de vivir aquí. Dicen que la educación es pública muy buena. Sin embargo, hay demanda de colegios privados. Ojalá los abran por la cuenta que me trae. En los institutos hay grupos apoyo a los gays y lesbianas, algo pionero en esta Comunidad.

Y hablando de Madrid. Las únicas canciones pop que me vienen a la memoria sobre Madrid no me gustan nada de nada: Pongamos que hablo de Madrid del sobrevalorado Antonio Flores, y En Madrid y Quédate en Madrid de Mecano.